sábado, 18 de diciembre de 2010

Cuando calienta el sol



Por el Mariscal Boldini

Se termina el año, terminó el campeonato y una cierta sensación de vacío nos preocupa. Se vendrán conversaciones de pan dulce, horribles y poco interesantes torneos de verano y por sobre todo, refuerzos.

Debo confesar que siempre me entretiene mucho el mercado de pases, intentando que no se me escape la data de quién pasó de Gimnasia de Jujuy a Argentinos. Pero lo cierto, la cruda verdad, es que el equivalente más cercano al mundillo del “mercado de pases” es el periodismo chimentero.

Si sr, es llenar horas de aire televisado y metros de papel impreso, con absolutamente nada o casi nada. Es la especulación sin hechos fuertes que la justifiquen. A uno le gusta el fútbol y consume horas y horas sin que haya fútbol de pormedio. Obviamente los pases tienen cierta adrenalina.

La sensación de “reforzarse”. Alguna cargada. Como cuando Fabbiani se postulaba el solito para ir a River. O lo que ahora sucede por ejemplo con Falcioni o Cappa. Tiene algo lindo. Después en marzo descubrimos que el crack que venía sin jugar un partido de Ucrania, justamente por algo no jugaba y que difícilmente la rompa con nuestra camiseta y tengamos que conformarnos con seguir viendo jugar al muerto de siempre.

Capítulo aparte para los pases frustrados. Justamente, una gran página futbolera (www.enunabaldosa.com) tiene una sección exclusiva sobre el tema, llamada “Mal Pase”. El placer de ver a tipos posando para los fotógrafos del diario con una camiseta que nunca llegaron a usar, es incomparable, sobre todo por ese gesto ganador que siempre acompaña la foto.

Una última reflexión, ese chusmerio existe porqué, al igual que los programas de espectáculos, el fútbol es un producto más en la góndola del supermercado. Lo cual no es necesariamente malo. Pero todas esas horas de aire televisivo deben ser llenadas y ya no alcanza la entrevista al tipo tirado en un balneario de punta mogotes o insinuar cuál es la revelación del verano. La Chicha, mate en mano, me sopla el último gran parecido entre chimentos y deportes; la muy baja calidad de los periodistas de uno y otro medio.

Parafraseando la propaganda de Quilmes, todo esto es más peligroso que el “tema de verano”.



Ah, Gontan, se viene el cumpleaños de Calma Chicha, a ver si lo festeja en Mar del Plata como corresponde...

2 comentarios:

  1. Futbol y verano nunca funcionaron bien juntos.
    Un par de clasicos, algunas caras nuevas, y mucho, muchisimo humo.
    El periodismo deportivo debería estar prohibido de Enero a Marzo.

    Valderrama con la 10 del Rojo??

    El Diego diria: El pibe + El Palomo + 9!!!

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  2. El de la foto es el nieto del turco Mohamed??!!!! El turquito está hecho mierda!

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